- El día después ha comenzado en Siria, teniendo tanto motivos para entusiasmarse como para preocuparse.
- La reconstrucción del país es una tarea crucial para la estabilidad mundial y requerirá toda la inteligencia y buena voluntad posible.
- Para asegurar esto se deben dejar de lado batallas de ego, divisiones comunitarias, y buscar la influencia y el espíritu de conquista.
- Los líderes occidentales y árabes deben evitar la interferencia pero deben estar listos para ayudar si se les solicita.
- Abou Mohammed al-Joulani, quien derrocó al régimen, es un islamista pragmático que parece tener consciencia de su responsabilidad.
Conclusión: Debido a los retos y las incertidumbres, la vigilancia extrema es necesaria en medio de las transformaciones en Siria.