Netanyahu ha prometido 'destruir' a Hamas, pero no ha articulado una estrategia para administrar y reconstruir Gaza una vez que sus gobernantes sean supuestamente 'destruidos'.
Muchos sugieren que el objetivo de Netanyahu es prolongar la guerra indefinidamente para extender la vida de su coalición y su carrera.
El ministro de defensa de Netanyahu, Yoav Gallant, ha sugerido que Israel acuerde un liderazgo palestino alternativo en Gaza, pero Netanyahu lo ha rechazado rotundamente.
El establecimiento político de Israel parece incapaz de cambiar o desalojar a Netanyahu, lo que obliga a que la comunidad internacional tome la iniciativa.
Los planes para después del día ya existen en principio, centrándose en una propuesta para que Egipto, los Emiratos Árabes Unidos y Marruecos lideren una fuerza internacional en Gaza.
Estados Unidos está desarrollando un 'mega-acuerdo' para aislar a Hamas y resolver finalmente el conflicto entre Israel y Palestina.
Conclusión: A pesar de la ira y el sufrimiento resultantes del conflicto en curso, aún quedan caminos por recorrer y se debe persuadir a Netanyahu de elegir la paz.