Kamala Harris enfrenta escepticismo en Michigan, fundamentalmente alrededor de sus antecedentes de fiscal y su respuesta a las cuestiones de Gaza.
El apoyo del gobierno de los Estados Unidos a la represalia de Israel tras el ataque de Hamas divide profundamente al Partido Demócrata.
La comunidad árabe-estadounidense de Michigan, descontenta con los gastos militares de Biden en Israel, podría ser crucial en las elecciones.
La campaña de Harris necesita abordar las exigencias de los manifestantes de Gaza, ya que ignorar su indignación podría deshacer la unidad del partido.
Existe una creciente demanda de un enfoque más humano hacia los civiles palestinos.
Conclusión: Si bien Kamala Harris está rompiendo barreras y generando esperanza, su éxito dependerá de su habilidad para abordar temas delicados, como el apoyo del gobierno de los Estados Unidos a Israel, y su capacidad para apelar a las comunidades clave como la árabe-estadounidense en Michigan.