La Corte Suprema ya no se percibe como una institución de gobernancia legítima que se preocupa por interpretar correctamente la ley.
El supermayoría de la corte derecha ha socavado cualquier consenso anterior, utilizando la originalidad para cambiar décadas de precedente legal.
Los fallos de la Corte ahora se alinean casi siempre con las prioridades políticas del Partido Republicano moderno.
La enseñanza de la ley constitucional se ha vuelto casi imposible debido a la velocidad y la ambición con la que estas transformaciones legales ocurren.
Los cambios en la Corte Suprema han resultado en un rechazo creciente de la supremacía judicial entre los estudiantes, tanto progresistas como conservadores.
Conclusión: En vista de estos cambios drásticos, es crucial para los profesores restablecer la fe en el sistema legal y determinar el papel que jugará la Corte Suprema en el futuro.