Rachida Dati, la ministra de Cultura tiene una creciente popularidad entre los franceses y ambiciones para convertirse en la alcaldesa de París.
Dati ha enfrentado desafíos legales relacionados con acusaciones de corrupción pasiva y tráfico de influencias
Se sospecha que Dati recibió 900,000 euros mientras servía como miembro del Parlamento Europeo, cargos que ella niega.
Hubo un contrato de 800,000 euros firmados en un tiempo similar con Orange.
Rachida Dati ha usado todas las posibilidades jurídicas para evitar la justicia, logrando retardar el proceso judicial.
Conclusión: A pesar de los problemas legales y las acusaciones, hasta ahora, Dati ha sido capaz de mantener su popularidad y ambiciones políticas. No obstante, el futuro es incierto.