Los astronautas Barry Wilmore y Sunita Williams han estado atrapados en la Estación Espacial Internacional durante más de dos meses debido a un problema con su nave, el Starliner de Boeing.
Una falla con cinco de los veintiocho propulsores del Starliner ha llevado a la sospecha de la confiabilidad de la nave.
Boeing ha tenido varios problemas técnicos en el pasado, incluido un incidente en 2019 cuando el Starliner no pudo acoplarse a la ISS.
La NASA ha pagado 4.2 mil millones de dólares por las primeras misiones del Starliner.
La NASA ha externalizado la construcción de naves espaciales al sector privado, un movimiento que ahora muestra sus limitaciones.
La NASA está considerando usar la cápsula Crew Dragon de SpaceX, el principal competidor de Boeing, para rescatar a los astronautas.
Conclusión: Este incidente pone de relieve las limitaciones de externalizar la construcción de naves espaciales al sector privado y plantea preocupaciones sobre la confiabilidad de los proveedores de la industria espacial como Boeing.