La ausencia más destacada en la sesión anual del Parlamento chino es la conferencia de prensa del primer ministro.
Xi Jinping ha fortalecido el control del Partido Comunista sobre el estado y reducido la duración de la sesión parlamentaria.
Las reformas han refutado la lucha contra la pobreza de Xi Jinping y establecido que el partido tiene prioridad sobre el país.
Xi Jinping tiene el poder para permanecer en el cargo tanto tiempo como desee, lo cual es contrario a la política anterior.
La 'seguridad nacional' se usa para reforzar el control del partido sobre sus supuestos enemigos.
A pesar de las promesas de reforma y apertura, los hechos muestran una creciente propensión hacia los intereses del Partido Comunista Chino.
Conclusión: Esta supremacía del partido amenaza tanto la economía como la sociedad civil, y si la prosperidad de China disminuye, su justificación también puede debilitarse.