Felipe VI presidió un acto conmemorativo del 50 aniversario de la proclamación de su padre, valorando la contribución de la Corona a la consolidación de la democracia.
Las palabras de Felipe VI tuvieron un efecto inspirador, en un contexto de lucha política y condena del fiscal general del Estado.
El rey elogió la nueva etapa de la historia de España basada en la paz, el trabajo y la prosperidad fruto del esfuerzo común.
La reina Sofía, Felipe González y los dos supervivientes de los padres de la Constitución fueron premiados con el Toisón de Oro, la más alta distinción de la Casa Real.
Se observa una división profunda entre los dos partidos mayoritarios, exacerbada por la condena del fiscal general.
Conclusión: En el contexto actual de tensión política, el llamamiento de Felipe VI a la sensatez y la convivencia se hace especialmente necesario.