La transición política española de la dictadura de Franco a la democracia ha sido ampliamente elogiada.
También hubo una revolución cultural y social que acompañó y anticipó en parte la transición política.
El aniversario de la muerte de Franco da la oportunidad de revisar dicha revolución cultural y social.
La llegada de la democracia trajo una profunda renovación cultural.
El reconocimiento y protección de los derechos de expresión, producción y creación literaria, artística, científica y técnica fueron fundamentales.
Las importantes inversiones públicas y privadas en cultura han dado sus frutos.
La democracia trajo aire de libertad y una revolución de las costumbres.
El país se ha modernizado a lo largo de las décadas.
Conclusión: España tiene desafíos enormes a enfrentar en el futuro, pero los progresos culturales y sociales logrados demuestran sus capacidades y dan confianza en el futuro.