Nicolas Sarkozy, ex presidente de Francia, ha ingresado en prisión por conspiración para financiar campañas electorales.
Sus abogados han solicitado su libertad provisional.
Sarkozy está condenado por su papel en un plan para financiar su campaña en 2007 con fondos de Muamar el Gadafi.
El hecho ha dejado en shock a la sociedad francesa, agregando una sensación de inestabilidad en medio de una crisis política y económica.
El presidente Macron, pese a críticas, recibió a Sarkozy de manera privada, aumentando la insatisfacción en la población.
El apoyo a Sarkozy dentro del círculo político conservador, a pesar de su retirada, sigue siendo notable.
El ingreso a prisión de Sarkozy se suma a varios incidentes que han dejado a Francia conmocionada.
El macronismo está en crisis, con el declive de formaciones centristas y la creciente influencia de la extrema derecha e izquierda radical.
El descontento y la inestabilidad política, económica y social es notablemente palpable en Francia.
Conclusión: Los sucesos recientes siguen exacerbando la crisis en Francia, con un malestar civil creciente y una percepción de inestabilidad en el gobierno.