El Partido Popular (PP) usa el lema “Mafia o democracia” para destacar su oposición al Gobierno actual encabezado por Pedro Sánchez.
Las críticas y ataques verbales han aumentado entre las facciones derechistas y izquierdistas, y en particular entre el PP y el PSOE.
Muchas campañas contra el gobierno se originan en filtraciones y acusaciones de corrupción, algunas sin pronunciamiento judicial todavía.
El PSOE enfrenta cuestionamientos por el caso de la militante Leire Díez, que aparentemente se comunicó con empresarios investigados para obtener información comprometedora.
Tanto el PSOE como el PP podrían estar involucrados en manipulaciones distractoras, lo que disminuye la fiabilidad del estado.
Conclusión: Ambos partidos deben esforzarse por restablecer la dignidad en la política y reducir la hostilidad. De lo contrario, deben utilizar de manera óptima las herramientas legales disponibles, como las elecciones y las mociones de censura.