El Parlamento Europeo aprobó la formación de la Comisión Europea (CE), que seguirá presidida por Ursula von der Leyen durante los próximos cinco años.
El nuevo equipo de la CE presenta una derechización notable, marcada por la inclusión de políticos de extrema derecha.
El respaldo a la nueva CE provino principalmente de los conservadores europeos, los socialdemócratas y los liberales, a pesar de deserciones dentro de estos grupos.
En el nuevo escenario político, los conservadores cuentan con la posibilidad de formar mayorías a través de la colaboración con grupos ultraconservadores.
La tensión política y la inestabilidad son características marcadas de la formación de la nueva comisión y de las relaciones entre los distintos grupos políticos.
La segunda Comisión Von der Leyen, de orientación conservadora, iniciará su trabajo en un contexto complicado y marcado por la falta de estabilidad.
Conclusión: La formación de la nueva Comisión Europea marca un giro a la derecha en la política europea, un reflejo del aumento de los gobiernos conservadores en el continente. Este cambio plantea un nuevo escenario desafiante y complicado por la ausencia de mayorías estables, caracterizado por tensiones y desconfianzas entre los diferentes grupos políticos.