El gobierno municipal de Barcelona ha decidido no continuar con la Copa América en la ciudad en 2026.
Se cree que la decisión se tomó apresuradamente, sin el debate necesario con los organizadores y las entidades ciudadanas más relevantes.
Se tiene la opinión de que la Copa América ha beneficiado ampliamente la imagen internacional de Barcelona, el turismo y la promoción de los deportes acuáticos.
El gobierno municipal no está dispuesto a repetir su inversión pública en la competencia, que se sitúa en torno a los 10 millones de euros.
El gobierno municipal considera que la Copa América ya ha brindado a la ciudad todos los beneficios posibles.
Se está planteando la posibilidad de que Barcelona sea la sede permanente de la competición.
La posibilidad de que la Copa regrese a Barcelona no está completamente descartada, aunque el ayuntamiento no proporcionará apoyo financiero.
El equipo ganador de la competición, el Emirates Team New Zealand, que será el encargado de organizar la próxima edición, no está dispuesto a entrar en negociaciones.
Conclusión: Es necesario revisar la decisión precipitada del gobierno municipal, posiblemente a través de auditorías y debates más profundos, considerando las contrapartes que puede ofrecer la competencia antes de descartar completamente su continuidad en Barcelona.