El intento de asesinato del PM eslovaco, Robert Fico, es un golpe a Europa, sus valores y principios.
Aparece una tendencia creciente de violencia en la política europea, lo que indica una amenaza para la democracia.
A pezar las políticas antieuropeas de Fico, él todavía fue elegido democráticamente.
Ha habido varios ataques a cargos electos en Alemania, Suecia, Francia, y España.
Una espiral de ataques por razones políticas se está volviendo una realidad, con un posible efecto contagio de violencia.
Los extremistas y grupos neonazis son los responsables de muchos de estos ataques.
La extrema polarización política y la radicalización están alimentando este incremento de violencia.
Conclusión: Europa no puede permitir que su política polarizada se convierta en violencia, y debe abordar esta violencia política antes de enfrentar otros desafíos. Los discursos de odio y el populismo son una amenaza grave para la democracia europea.