El presidente chino, Xi Jinping, visita Francia en un intento de reconstruir las relaciones con Europa, especialmente en medio de tensiones con EE.UU y el tema de la guerra en Ucrania.
La visita también abordará contenciosos comerciales entre China y la UE, con la UE acusada de 'proteccionismo' y de investigación de importaciones chinas de vehículos eléctricos.
La unión económica de China con Rusia es una preocupación para la UE. China es un gran apoyo para la economía rusa, siendo el primer comprador de petróleo ruso.
Xi visitará Serbia y Hungría, en un intento de consolidar la influencia de China en Europa y neutralizar las amenazas tarifarias de la UE.
Hungría mantiene relaciones diplomáticas y comerciales con regímenes autoritarios como Rusia y China, respaldando a estos países al defender sus propios intereses.
Conclusión: Aunque se espera que el viaje no cambie la dinámica actual entre China y la UE, servirá para demostrar que Pekín sigue siendo visible y relevante en Europa y no renuncia a sus lazos con Rusia.