La guerra de Gaza ya lleva seis meses y la catástrofe humanitaria sigue empeorando.
Las posibilidades de un nuevo alto al fuego antes del Ramadán han disminuido.
Estados Unidos y la Unión Europea, respaldados por el Reino Unido y los Emiratos Árabes Unidos, intentan encontrar soluciones para socorrer a los civiles palestinos.
Joe Biden anunció la construcción de un puerto temporal en Gaza para enviar ayuda.
La presidenta de la Comisión Europea, Ursula von der Leyen, confirmó que se establecerá un corredor marítimo desde Larnaca hasta Gaza.
Las organizaciones benéficas, incluyendo World Central Kitchen y Open Arms, están trabajando para proporcionar ayuda alimentaria.
El respaldo de Washington está en línea con el aumento de la presión de Biden sobre el primer ministro israelí.
La ONU afirma que una cuarta parte de la población de Gaza está al borde de la hambruna.
Conclusión: Los esfuerzos occidentales para proporcionar ayuda humanitaria son vitales, pero no redimen la incapacidad de presionar a Israel para que cese la guerra o acepte un alto al fuego.