El primer ministro húngaro, Viktor Orbán, ha cedido a las presiones de la UE permitiendo la apertura de negociaciones para el ingreso de Ucrania en la Unión Europea.
Orbán ha bloqueado la revisión del presupuesto comunitario de la UE que incluía una ayuda de 50.000 millones de euros para Ucrania.
La UE y Orbán han acordado dos enmiendas: una evaluación anual del uso de las ayudas a Ucrania y una revisión de la asistencia financiera a Ucrania dentro de dos años.
La Comisión Europea mantiene congelada una suma considerable destinada a Hungría por violaciones al Estado de derecho.
Hungría afirma que Ucrania es un estado fallido mientras que la UE sostiene que la ayuda financiera continuará mientras persista la invasión rusa.
El desbloqueo de la ayuda financiera es crucial para Ucrania que solo dispone de fondos hasta marzo para mantener funcionando su Administración.
Conclusión: La decisión de Orbán de ceder a las presiones de la UE y permitir la ayuda económica a Ucrania evidencia la tensión existente y las problemáticas asociadas al Estado de derecho en Hungría. Esta situación plantea un desafío para la cohesión en el bloque europeo.