la historia del catalán ha sido una lucha constante entre su exclusión y la integración de los nuevos hablantes de la lengua.
El uso de catalán está disminuyendo entre los jóvenes, con el castellano consolidándose como la lengua franca.
La lucha por la preservación del catalán requiere más que solo promoción política y cultural.
El catalán está en peligro de convertirse en el idioma interno de una comunidad lingüística estancada, lo que eventualmente podría llevar a su extinción.
La preservación del catalán requiere una garantía de conocimiento universal de catalán y castellano, y más allá, la promoción de modelos de convivencia y respeto mutuo.
Conclusión: El futuro del catalán está en juego. El catalán necesita ser presentado como un punto de encuentro e intercambio, y no como una imposición.