Estados Unidos acude a votar tras la carrera electoral más larga, costosa, accidentada y violenta en la memoria.
La política en los EE.UU. se ha convertido en una lucha existencial por los principios que sostienen las democracias occidentales.
Donald Trump se presenta por tercera vez, con un liderazgo basado en un mesianismo fanático.
Trump ha sobrevivido políticamente a varios procesos judiciales y tiene la posibilidad de ganar nuevamente.
La vicepresidenta Kamala Harris tiene la responsabilidad de repetir la victoria de Joe Biden para reconstruir la política.
Conclusión: Las votaciones en Estados Unidos son una decisión entre seguir el sistema democrático o ir en contra de él, bajo la influencia del autodenominado 'trumpismo'.