La inmigración aún no se considera un problema serio en España, regular o irregular.
El aumento de la percepción de la inmigración como problema está relacionado con el uso irresponsable por parte de la ultraderecha.
El caso de los menores no acompañados en Canarias es angustioso pero puntual dentro del amplio debate migratorio.
Alberto Núñez Feijóo utilizó la sesión para abordar un problema interno de su partido, en lugar del tema migratorio principal.
Pedro Sánchez subraya la necesidad de recibir a inmigrantes para compensar la caída demográfica. Ha presentado un plan de integración y convivencia intercultural.
El Gobierno solicitará a Bruselas el adelanto de la entrada en vigor del pacto europeo de migración y asilo.
Conclusión: El enfoque sobre la migración en España se ha tornado más político que problemático. La percepción irracional del problema inmigratorio está siendo alimentada por la ultraderecha, y las soluciones propuestas como el plan de integración de Sánchez deben ser observadas con detenimiento.