La guerra iniciada hace un año ha sido incesante, causando una gran cantidad de muertes y destrucción.
Esta situación ha sido calificada como la segunda Nakba, refiriéndose al concepto de catástrofe en árabe.
Hamás ha demostrado la vulnerabilidad de Israel, dando lugar a una respuesta militar que ha excedido el legítimo derecho de defensa.
Los ataques de Israel incluyen blancos civiles, contribuyendo al alto número de víctimas.
La guerra ha escalado a ser una guerra regional, con posibles implicaciones para Irán y Estados Unidos.
Además de la pérdida de vidas, el conflicto ha violado derechos y libertades, incluyendo la supresión de la prensa.
Israel ha sido señalado por crímenes de guerra y está bajo el escrutinio de dos tribunales internacionales.
Conclusión: Esta segunda Nakba ha agravado la situación en Oriente Próximo, aumentando el resentimiento y transformando a Israel en una fortaleza militar agresiva, alejada de los ideales democráticos.