Migrantes desaparecieron en el Atlántico, marcando una de las mayores tragedias migratorias en la costa española.
En este año, se reporta la muerte de 781 personas navegando hacia el archipiélago, sin contar el incidente más reciente.
El drama humano agrava la demanda de un acuerdo político que mejore la situación en las Islas Canarias, especialmente de los menores migrantes.
Los servicios de acogida están de facto colapsados, atendiendo a más de 5,500 menores cuando su capacidad máxima es de 2,000.
Negociaciones entre el gobierno, PP y Ejecutivo Canario están en progreso, necesitando resoluciones urgentes.
La gestión migratoria requiere colaboración e inteligencia, no demagogia y políticas xenófobas de la ultraderecha.
Es esencial remediar la situación de los menores, pero también se requieren soluciones a largo plazo que sobrepasen la esfera nacional.
En los primeros nueve meses de este año, El Archipiélago recibió a 30,808 inmigrantes irregulares, el doble equivalente al período similar del año 2023.
Conclusión: El debate sobre la política migratoria es una necesidad perentoria. Se espera que Pedro Sánchez aborde este reto en su próxima aparición en el Congreso, anunciada para el día 9.