El recién reelegido presidente de Argelia, Abdelmayid Tebún, se mantiene en el poder con un mandato respaldado por un cuestionado 95% de votos.
La alta participación declarada (48%) ha despertado sospechas de falta de transparencia.
A pesar de la promesa inicial de Tebún de llevar a cabo reformas democráticas, su gobierno ha sofocado disidencias.
El gobierno ha contenido el descontento popular a través del reparto de ingresos de gas y petróleo en forma de subvenciones directas.
Argelia ha perdido influencia internacional en el Sahel y el Magreb durante el mandato de Tebún.
Se describe un panorama de retorno al régimen de partido único en Argelia y hay un control estricto sobre la cobertura de prensa de las elecciones.
Conclusión: En resumen, la reelección de Tebún, pese a las promesas de cambio, parece marcar la continuación del régimen de partido único en Argelia, con crecientes preguntas acerca de la transparencia de las elecciones y el estado de las libertades civiles en el país.