El veterano policía Josep Lluís Trapero ha sido confiado para devolver la tranquilidad a los Mossos d’Esquadra, inmersos en crisis debido a la inestabilidad política en Cataluña.
Trapero es reconocido por su amplia experiencia y defensa cerrada de la policía catalan, y se espera que pueda garantizar una de las prioridades del nuevo Govern: la seguridad pública.
Su nombramiento ha conllevado la destitución del comisario Eduard Sallent, con quien mantenía diferencias, y será sustituido por Miquel Esquius, de plena confianza de Trapero.
El nuevo director general tiene como responsabilidad diseñar planes del Ejecutivo para reducir delitos y garantizar un periodo de estabilidad anhelado por los agentes y mandos.
Trapero ha sido reconocido como transmitir calma a la ciudadanía durante eventos crisis y se le ve como la pieza clave para reforzar la autoridad de la policía y revertir curva de delincuencia en la región.
Conclusión: El Govern de Cataluña busca resolver la inestabilidad y las crisis en su cuerpo policial incorporando a Josep Lluís Trapero, un veterano con amplia experiencia y gran respeto por los Mossos d'Esquadra. Su nombramiento es clave en el fortalecimiento de la seguridad y la reducción de la delincuencia en la región.