- La crisis poselectoral en Venezuela ya corre el riesgo de volverse crónica y Maduro se mantiene inmovible ante la presión interna e internacional.
- La represión y persecución contra los líderes políticos opositores y quienes protestan es la preocupación actual.
- El Consejo Nacional Electoral aún no ha presentado pruebas de la victoria de Maduro desde julio 28.
- El Gobierno persigue una estrategia para que el Tribunal Supremo de Justicia, también bajo control gubernamental, resuelva la controversia.
- La oposición hizo público más del 80% de las actas, evidenciando la victoria del candidato opositor, Edmundo González.
- Existe riesgo de un retroceso total del régimen, con estrategias de terror, división de la oposición y desgaste de la comunidad internacional.
- Propuestas de nuevos comicios o un Gobierno de coalición transitorio han sido rechazadas por tanto Maduro como la oposición.
- La presión internacional debe mantenerse firme contra las acciones de Maduro.
Conclusión: La firmeza internacional y la búsqueda de una salida negociada son vitales para superar la parálisis en Venezuela.