Venezuela enfrenta una creciente crisis política y represión por parte del gobierno de Nicolás Maduro, causando temor entre los líderes de la oposición.
Brasil, Colombia y México buscan una solución negociada a la crisis postelectoral, con el apoyo de la comunidad internacional.
Se busca constancia de los resultados de las elecciones presidenciales, especialmente en términos de actas oficiales por mesa de votación.
Los datos preliminares sugieren una posible victoria de la oposición.
Hay una tentativa de mantener la transparencia en los resultados y la necesidad de una 'verificación imparcial'.
La represión y la detención de más de 2.000 personas deben cesar como un indicativo de la voluntad de Maduro de iniciar negociaciones.
Conclusión: La situación en Venezuela es crítica y requiere una solución negociada y verificación independiente de los resultados electorales para resolver la crisis y prevenir más represión y violencia.