El rápido relevo del gobierno en Bangladesh tras tres semanas de manifestaciones estudiantiles violentamente reprimidas, que derrocó a la primera ministra Sheikh Hasina y la sustitución de Hasina por Muhammad Yunus.
La cúpula militar, a diferencia de lo que se temía, resolvió el vacío de poder y no tomó el poder para sí.
Yunus, economista y premio Nobel de la Paz, se enfrenta al desafío de sacar al país de una espiral de violencia y organizar elecciones libres y pluralistas.
Las protestas fueron provocadas por una cuota del 30% de los cargos públicos reservados para hijos de veteranos de guerra, y por el deterioro de la democracia en Bangladesh en una dictadura cleptocrática.
Conclusión: La caída repentina de la dictadora y su reemplazo por Yunus, una figura de prestigio, constituye, al menos en principio, un mensaje de esperanza en un panorama de creciente retroceso democrático.