Rishi Sunak ha convocado anticipadamente elecciones para el 4 de julio en el Reino Unido, sorprendiendo a aliados y rivales.
Las encuestas muestran una distancia de más de 20 puntos entre el Partido Conservador y la oposición laborista.
Sunak ha logrado ordenar las cuentas y reducir la inflación al nivel similar al de la Unión Europea.
El primer ministro ha adoptado una política de deportación de inmigrantes a Ruanda que ha atraído críticas de las principales organizaciones humanitarias.
Estas elecciones no son tanto sobre Sunak, sino sobre el juicio de los ciudadanos a más de una década de conservadurismo en el Reino Unido.
Las encuestas muestran a Keir Starmer, líder del Partido Laborista, como el próximo primer ministro.
Conclusión: Estas elecciones representan un juicio de los ciudadanos a más de una década de políticas conservadoras, con Starmer posicionado como una figura más centrada y capaz de enfrentar los retos actuales que enfrenta el Reino Unido.