- Benjamín Netanyahu ha basado su carrera política en desafiar limites y normas tanto a nivel nacional e internacional.
- Ha impuesto un castigo colectivo a la población civil de la Franja de Gaza tras el ataque de Hamas.
- Planea una ofensiva terrestre contra Rafah, ignorando potenciales desastres humanitarios y a pesar de los llamados a la paz.
- Utiliza estos conflictos violentos para ocultar sus fracasos políticos y de seguridad interna.
- La guerra en Gaza, una de sus estrategias, no ha cumplido ninguno de los objetivos planteados.
- Ha ignorado violaciones al derecho internacional en múltiples situaciones.
Conclusión: Netanyahu continúa fomentando un curso de acción destructivo e insostenible, ignorando las repercusiones humanitarias e internacionales.