El plan Next Generation promueve la transición ecológica, con inversiones significativas para la instalación de placas solares, rehabilitación energética de edificios y ayudas para coches eléctricos.
Los particulares no están recibiendo el apoyo a la velocidad requerida, lo cual favorece a las rentas altas y desfavorece a quienes no pueden asumir el costo total de la inversión.
Las subvenciones afectadas tardan alrededor de dos años en ser entregadas, lo cual dificulta la participación de aquellos que necesitan más la ayuda.
El origen del retraso se atribuye a las dificultades de gestión administrativa y a problemas de diseño con los planes teóricos.
El porcentaje de turismos eléctricos en España es la mitad que la media europea. Las soluciones podrían implicar desde deducciones fiscales hasta descuentos inmediatos en la compra de coches eléctricos.
Conclusión: La transición ecológica es esencial y urgente, pero la tardanza en la entrega de subsidios y dificultades en su ejecución está generando desigualdad. Es necesario mejorar la gestión de éstos para garantizar una distribución justa y se debe incrementar el alcance de las ayudas, especialmente en los sectores que más las necesitan.