Los obispos españoles han reaccionado de forma evasiva ante el escándalo de los abusos sexuales a menores por parte de la Iglesia.
El análisis de EL PAÍS revela omisiones y lagunas en el informe de la Conferencia Episcopal.
El informe ignora más de 300 casos ya comunicados y menosprecia casos previamente publicados.
La presentación del texto fue realizada sin transparencia, sin admitir preguntas.
El informe no respeta el trabajo original de EL PAÍS que recoge 1.460 acusados y al menos 2.608 víctimas.
La falta de detalle sobre las víctimas y los abusadores impide la correcta investigación de los casos.
La gestión de ese escándalo por parte del cardenal Juan José Omella ha sido cuestionada.
Conclusión: Es evidente que la Conferencia Episcopal española necesita abordar con seriedad y transparencia estos graves casos de abusos y reparar a las víctimas.