El abandono escolar temprano ha sido un problema persistente en la educación española, situando a España en la cola de la Unión Europea.
Afortunadamente, la tasa de abandono escolar temprano en España ha estado disminuyendo, de un alarmante 31,7% en 2008 a un 13,6% en 2023.
Los jóvenes que abandonan temprano la escuela tienen un mayor riesgo de exclusión social y desempleo.
La educación entre las comunidades autónomas de España es desigual, con Navarra teniendo un porcentaje mucho más bajo de abandono escolar temprano en comparación con Ceuta.
Los estudiantes de familias con ingresos más bajos son más susceptibles al abandono escolar temprano.
La formación profesional (FP) está en crecimiento continuo, pero todavía tiene altas tasas de abandono.
Conclusión: Espera lograr una tasa de abandono escolar temprano del 9% para el 2030, los esfuerzos deben intensificarse para lograr esta meta, incluyendo el apoyo adicional para los estudiantes vulnerables, aumentando el número de plazas en FP y las becas.