Ocho décadas después del nazismo, la reconstrucción de Europa basada en los valores del humanismo liberal se tambalea y es gravemente herida.
La deserción de los Estados Unidos de la alianza occidental contribuye a esta desestabilización.
Esta involución está impulsada por autocracias que buscan impugnar el viejo orden basado en reglas.
Las amenazas incluyen el neozarismo de Putin, el imperialismo chino y la ruptura del vínculo transatlántico.
Conclusión: Europa necesita refundarse con pilares autónomos para defender su modo de vida, garantizando la disuasión y el refuerzo de lazos con socios occidentales.