Israel commemoró el aniversario del trauma del 7-O, el día más sangriento contra los judíos desde el Holocausto, en medio de una guerra con Irán.
Irán, quien busca armas nucleares y niega la existencia de Israel, está detrás de varias amenazas contra el estado judío, como Hamas, Hizbulá y los Hutíes.
Los ataques de Hamas el año pasado mataron a 1.200 israelíes, dejaron miles heridos y tomaron cientos de rehenes, lo que dejó a Israel extremadamente vulnerable.
La respuesta de Israel a los ataques, aunque justificada, ha llevado a excesos que han reducido su apoyo global.
A pesar de la destrucción y el estancamiento en Gaza, el gobierno de Netanyahu ha logrado restaurar la capacidad de disuasión del ejército israelí y debilitar a Hizbulá.
Conclusión: Israel tiene el derecho a defenderse, pero riesgo de sus ataques es que su autoridad moral depende del respeto a la ley internacional.