En una reunión entre dirigentes de Junts y del PSOE, el partido de Pedro Sánchez se comprometió a que la Fiscalía de Cataluña no recurriría la amnistía al ex conseller Buch y a Lluís Escolà.
El PSOE y Junts negocian con el borrado de los delitos del procés como moneda de cambio para la formación de Gobierno en Cataluña y los presupuestos del Estado.
La decisión de la Fiscalía de no recurrir la amnistía fue frenada por el fiscal general del Estado, evitando que el recurso llegue al Supremo.
Hay una injerencia del Ejecutivo en el Ministerio Público y un choque interno en este órgano.
Sánchez utiliza la Fiscalía para asegurar su continuidad en el poder.
Conclusión: En resumen, hay una manipulación por parte del gobierno de Pedro Sánchez para facilitar negociaciones y para garantizar su continuidad en el poder, lo que implica la interferencia con organismos como la Fiscalía y genera conflicto interno.