La Abogacía del Estado defiende inequívocamente la sentencia del procés en respuesta a las preguntas del Tribunal Europeo de Derechos Humanos.
El documento sostiene la proporcionalidad de la sentencia en relación con la gravedad de los delitos y su conformidad con el Convenio Europeo de Derechos Humanos.
La Abogacía del Estado argumenta que los cambios en el Código Penal español no alteran la conclusion de que la sentencia fue respetuosa con dicho Convenio.
Se defiende la competencia del Tribunal Supremo para dictar la sentencia y rechaza la alegación de los líderes independentistas de que fueron condenados sin pruebas.
Se niega la vulneración del derecho de Oriol Junqueras a su representación política.
El escrito contradice indirectamente la exposición de motivos de la ley de amnistía, sosteniendo que el procés fue algo más grave que un simple movimiento de protesta.
Conclusión: El texto de la Abogacía no garantiza un fallo favorable del TEDH, pero evita la deslegitimación de la sentencia y del Tribunal Supremo por parte de otra institución del mismo Estado.