Más de dos años de brutal guerra y Ucrania aún está preparada para defender su democracia y territorio contra Rusia, pero no puede hacerlo sin la ayuda militar estadounidense.
Una mayoría de estadounidenses entienden esto y creen que controlar los sueños revanchistas de Vladimir Putin es el deber de América hacia Ucrania y la seguridad estadounidense.
La decisión del orador Mike Johnson de evitar una votación por temor a perder su puesto ante partidarios radicales ha puesto en riesgo la viabilidad de la ayuda a Ucrania.
Sin la artillería americana, Ucrania no puede resistir a un ejército con más hombres y municiones.
Retener la ayuda a Ucrania con objetivos políticos no relacionados genera un peligro significativo.
Las armas y la artillería estadounidenses son esenciales para que Ucrania pueda mantener su posición y eventualmente negociar el fin de las hostilidades desde una posición de fortaleza.
Permitir que Rusia imponga su voluntad en Ucrania sería un golpe devastador para la credibilidad y liderazgo de Estados Unidos, cumpliendo una de las metas a largo plazo de Putin.
Conclusión: La ayuda militar de Estados Unidos es esencial para Ucrania para mantener a raya a los rusos. La obstinación y los conflictos políticos internos en el Congreso de los EE.UU. están poniendo en peligro esta ayuda necesaria. Si se permite que Rusia imponga su voluntad en Ucrania, se corre el riesgo de animar a Putin y a otros autoritarios a probar aún más la paciencia de Occidente en otros escenarios.