El expresidente y posible futuro presidente de los Estados Unidos, Donald Trump, se enfrenta a su primer juicio criminal en Manhattan.
Aunque Trump ha representado su procesamiento como motivado políticamente y se presenta a sí mismo como una víctima, estos argumentos están basados en mentiras.
A pesar de las alegaciones de Trump de que los juicios son 'caza de brujas' motivadas por la política, las acusaciones han sido presentadas por diferentes fiscales en todo el país.
Trump ha aprovechado al máximo todos los recursos legales disponibles para él como acusado.
Trump ha manifestado su deseo de traer el Departamento de Justicia más plenamente bajo su control, si es elegido en noviembre.
El expresidente ha continuamente despreciado y denigrado el papel de los tribunales y el ejercicio del debido proceso.
Conclusión: La voluntad de Trump de menospreciar la justicia estadounidense cuando conviene a sus intereses y su completo desprecio por el estado de derecho, representan un peligro único para el país en caso de ganar un segundo mandato.