El presidente Biden está preparado para firmar un acuerdo fronterizo destinado a dificultar la entrada de migrantes a los Estados Unidos, restableciendo así la confianza pública en la capacidad del gobierno federal para mantener el control sobre la inmigración.
El afluxo de solicitantes de asilo en la frontera sur supera la capacidad del gobierno para atender sus demandas de manera justa.
Los demócratas han respondido lentamente a las crecientes demandas de acción por parte de alcaldes, gobernadores y electores.
La legislación migratoria actual está siendo bloqueada por la oposición republicana, incluido su candidato presidencial Donald Trump.
Los republicanos de la Cámara parecen desinteresados en la redacción de leyes y han accedido a las demandas de Trump.
La entrada de migrantes en la frontera sur nunca ha sido mayor, estimándose en 2,5 millones de personas durante el año fiscal 2023.
Está en proyecto un acuerdo en el Senado que elevaría el estándar para las solicitudes de asilo y proporcionaría fondos para acelerar las decisiones.
La propuesta también incluiría una disposición que limitaría el número de migrantes que pueden solicitar asilo en un día determinado.
Conclusión: Aunque es desafortunado que el presidente Biden haya tardado tanto en hablar sobre este tema, tiene razón al instar al Congreso a llegar a un acuerdo. Independientemente del destino de esta legislación, no debemos perder de vista lo que el Congreso puede y debe hacer: invertir los recursos necesarios y otorgar los poderes necesarios para retomar el control de la inmigración.