El Rassemblement national (RN), de ultraderecha, es el único partido que puede lograr la mayoría absoluta en las elecciones legislativas.
Los partidos republicanos han opuesto un frente unido para evitar que la dispersión del voto permita la elección del RN.
La disolución del Parlamento por el presidente tras perder las elecciones europeas queda a juicio de los votantes.
Marine Le Pen critica los pactos entre partidos como denegaciones de la democracia, si bien estos son conforme a la naturaleza republicana.
El apoyo de los partidos a Le Pen no representa a todo el pueblo francés ni a la gran mayoría de sus ciudadanos.
Si la ultraderecha llegase al poder, se erosionarían las libertades democráticas y se verían amenazados los derechos de las minorías.
El cambio radical de la política francesa estaría esperado por líderes como el húngaro Viktor Orban y el ruso Vladimir Putin.
Conclusión: La posible llegada al poder del RN amenaza seriamente la democracia francesa y la cooperación internacional, especialmente en la lucha contra el cambio climático. El desafío ahora es mantenerse firmes como ciudadanos y rechazar el avance de la extrema derecha.