Europa muestra debilidad en defensa debido a la guerra en Ucrania y la llegada de Trump a la presidencia.
Europa carece de una estrategia independiente de seguridad, confiada en el paraguas militar de Estados Unidos a través de la OTAN.
Las crecientes interferencias de Rusia obligaron a la Unión Europea a implementar con urgencia su propia estrategia de seguridad.
La UE activó un plan contra los drones rusos e intenta crear espacios de libre movilidad militar.
Europa requiere reimaginar su arquitectura de seguridad y capacidades de defensa, reduciendo la dependencia de las armas estadounidenses.
El incremento en el gasto militar de Europa revela un sistema fragmentado e ineficiente.
Las importaciones de armas desde fuera de la UE aumentaron un 77% en la primera mitad del año, beneficiando principalmente a Estados Unidos, Corea del Sur y Turquía.
Europa no posee una base industrial o tecnológica autosuficiente, y opera con seis veces más tipos de sistemas de armas que Estados Unidos
La guerra en Ucrania ha mostrado las limitaciones del sector militar europeo pero ha impulsado la industria armamentística de Ucrania.
Conclusión: Es crucial que Europa desarrolle su soberanía militar para superar dependencias, fragmentaciones e ineficiencias. La guerra en Ucrania debería actuar como un recordatorio de las limitaciones y debilidades existentes.