El presidente francés, Emmanuel Macron, ha convocado elecciones legislativas anticipadas después de los malos resultados de su partido en las elecciones europeas.
Macron buscó formar un bloque moderado y europeísta centrífugo a la socialdemocracia, como respuesta a la victoria ultraderechista de Reagrupamiento Nacional.
Sin embargo, la izquierda francesa, pese a su tradicional fragmentación, ha conseguido formar una coalición llamada Nuevo Frente Popular (NFP) que incluye a socialistas, comunistas, ecologistas y La Francia Insumisa.
Esta frágil y heterogénea alianza reconoce el temor al avance de la extrema derecha y representa un último intento de la izquierda para alcanzar el poder.
Aunque el NFP tiene visiones distintas sobre el futuro social, económico y energético de Francia, espera aglutinar el voto desde la socialdemocracia hasta la izquierda radical.
El NFP va a imponer nuevos impuestos a las grandes fortunas y a las rentas más altas, lo que generará centenas de miles de millones para cubrir el aumento del gasto.
Las elecciones parecen estar convirtiéndose en un enfrentamiento entre el Reagrupamiento Nacional y el Nuevo Frente Popular.
Conclusión: En conclusión, el sorpresivo giro de Macron de llamar a elecciones anticipadas ha desencadenado una reorganización del panorama político en Francia. La izquierda se ha unido en un frente en un intento de mantener a raya a la ultraderecha, pero su programa será difícil de aplicar debido a sus diferencias internas.