El barco de la ONG española Open Arms ha partido hacia Gaza con 200 toneladas de alimentos para su población, largamente apenada.
Gaza ha estado recibiendo ayuda humanitaria muy limitada desde el 7 de octubre y depende de la asistencia exterior para sobrevivir.
El gran desafío es la guerra en un territorio densamente poblado con mezcla de civiles y combatientes.
A pesar de las reglas de guerra, la población civil ha sido muy afectada y ha generado críticas hacia Israel de EE.UU. y la UE.
Se están realizando esfuerzos para enviar asistencia a Gaza, aunque estos son insuficientes para las necesidades de la población.
Conclusión: Es crucial reanudar el flujo de asistencia terrestre además de los envíos aéreos y marítimos para atender a las necesidades de la población de Gaza. Hamas debe colaborar y no obstaculizar estos esfuerzos.