La guerra en Oriente Medio ha entrado en una nueva dimensión con el ataque de Irán sobre ciudades de Israel, incluyendo Jerusalén y Tel Aviv.
Esta acción puede llevar a una mayor implicación de Estados Unidos, que ya ha prometido ayudar a Israel a defenderse.
La intervención iraní es una respuesta a los ataques israelíes contra Hizbulá y la muerte de sus líderes.
El sistema de defensa de Israel, la Cúpula de Hierro, ha logrado abatir muchos de los misiles iraníes.
Es incierto si este conflicto llevará a una escalada mayor o si las partes involucradas optarán por contenerse.
Israel ha iniciado una invasión terrestre en el sur del Líbano, con el objetivo de eliminar la infraestructura de Hizbulá.
Los ataques israelíes han debilitado a Hizbulá, pero también han llevado a un gran desplazamiento y pérdida de vidas en el Líbano.
Conclusión: La situación es extremadamente volátil, con potenciales escaladas y desescaladas dependiendo de las acciones y respuestas de los actores involucrados. Los ataques iraníes representan un marcado cambio en la dinámica, que puede desembocar en una mayor intervención de Estados Unidos en la región.