Desde octubre, unas 600 personas con esclerosis lateral amiotrófica (ELA) han fallecido en España sin recibir ayuda, a pesar de la aprobación unánime de la Ley ELA.
El Estado se comprometió a garantizar recursos financieros, que en la actualidad son asumidos por las familias de los enfermos.
Los costos de cuidado para los aproximadamente 4,000 ciudadanos actualmente diagnosticados con ELA se estiman entre 184 y 230 millones de euros anuales.
La falta de activación de la ley se debe a la ausencia de presupuesto y a disputas entre administraciones.
La ley fue aprobada sin una memoria económica que detallase la implementación, las fuentes de financiación, y su impacto en ingresos y gastos públicos.
Los costos de adaptación de vivienda o coche, costos de desplazamiento o fisioterapeutas, son casi imposibles de asumir para una familia media.
El Ministerio de Sanidad parece haber encontrado una solución temporal para comenzar a tramitar las ayudas.
Conclusión: La sociedad española comparte la frustración ante la falta de activación efectiva de la Ley ELA. Proporcionar soluciones rápidas a problemas cotidianos y urgentes es crucial para mantener la confianza de la ciudadanía en su clase política.