La propuesta de ley de amnistía está siendo debatida debido al voto negativo de Junts, PP y Vox.
Junts exige una amnistía que no contemple las excepciones en materia de terrorismo.
La ley de amnistía necesita los apoyos políticos necesarios en las Cortes y también cumplir con exigencias técnicas.
El Gobierno de Pedro Sánchez está defendiendo una amnistía enfocada en los beneficios para la convivencia.
La viabilidad de una amnistía necesita balancearse con una firme determinación para identificar los límites de negociación que no comprometan su viabilidad.
Es lógico que el Gobierno se mantenga firme en la redacción actual de la ley de amnistía.
El sistema legal permite que cualquier duda sea canalizada a través de mecanismos de control que analizan la existencia de indicios o actuaciones contrarias a derecho.
Conclusión: El margen de negociación para el Gobierno parece agotado y no se debe comprometer la entrada en vigor de una norma que beneficiará a cientos de personas por la situación particular de un individuo.