Dos años después de la reforma laboral del Gobierno de coalición del PSOE y Unidas Podemos, se alcanza un nivel récord de empleo y la reducción de desempleo más baja desde 2007.
A pesar de este cambio de modelo, se muestra una ralentización en la creación de empleo, que se espera se agudice en 2024 debido a la desaceleración del crecimiento.
El mercado laboral español ha resistido bien las presiones inflacionistas y tensiones geopolíticas, con una reducción de 130.000 personas en desempleo y 540.000 nuevos empleos en 2023.
El 40% de los nuevos empleos son con contrato indefinido, beneficiando especialmente a los jóvenes, pero se muestra una disminución en la velocidad de contratación y una predominancia de mujeres desempleadas.
A pesar de un aumento general en los contratos indefinidos, sigue siendo notoria la estacionalidad del mercado laboral español, particularidad de una economía cuyo sector servicios gana peso.
Conclusión: El reto de la nueva legislatura es consolidar el cambio de modelo del mercado laboral y paliar la inestabilidad laboral causada por la estacionalidad del empleo, lo que se espera beneficiará a la estabilidad de los trabajadores.