La Xunta de Galicia tardó tres semanas en activar el nivel 2 de alerta por contaminación marina tras una marea de pellets plásticos.
Este estado de alerta permitiría al Gobierno central aportar recursos a la limpieza.
Se cuestiona si el manejo de la crisis por el Gobierno Gallego fue motivado por intereses políticos.
La contaminación por microplásticos es uno de los mayores problemas ambientales y estos pellets provienen del mercante Tocanao.
Hay una sociedad civil que responde a estas crisis y una necesidad de enfocar la solución ambiental y no política.
Conclusión: La gestión de la crisis de contaminación en Galicia muestra la importancia de respuestas rápidas y enfocadas en el interés público en lugar de en intereses políticos. Además, la crisis pone de relieve la urgente necesidad de revisar las regulaciones de la UE sobre el manejo y transporte de microplásticos.