La operación de Ucrania en la región rusa de Kursk es vista como una victoria táctica y moral para Kiev.
Esta es la primera ofensiva en territorio ruso registrada desde la Segunda Guerra Mundial, con la captura de 2,000 prisioneros.
Las fuerzas de Zelenski han ocupado más de 450 kilómetros cuadrados de Kursk, mostrando una capacidad superior a las expectativas.
La Operación evidencia la mala evaluación del Kremlin de las capacidades militares de Ucrania.
La ofensiva desmonta la guerra informativa de Moscú y debilita el argumento prorruso de 'paz por territorios'.
Es esencial que el apoyo internacional a Ucrania se mantenga y que se aceleren los recursos necesarios para librar la guerra.
Conclusión: La ofensiva ucraniana en Kursk no sólo representa una victoria militar, sino también una victoria moral e informativa contra Rusia, demostrando su capacidad defensiva y la necesidad de un apoyo internacional fuerte.